Con residuos fecales, por lo que piden rechazar su consumo
Por eso, personal de la Municipalidad Provincial de Trujillo, específicamente de la Gerencia de Desarrollo Social y Subgerencia de Salud, están realizando constantes análisis a estos productos con muestras tomadas al azar que luego son examinadas en el laboratorio edil.
Lamentablemente, los resultados arrojan que el 100% de los productos analizados están contaminados con bacterias, enterobacterias (residuos fecales), organismos mesófilos, bacterias aerobias y salmonella, por lo que el subgerente de Salud, César Fernández Bazán, exhortó a la población en general a no consumirlos.
“Los vendedores son reacios a participar en las actividades de capacitación que organiza la municipalidad. Son pocos los que se comprometen a asistir y menos los llegan a capacitarse”, reconoció.
El alcalde de Trujillo, César Acuña Peralta, comprende que esto es un problema social, por lo que no se busca adoptar sanciones drásticas contra ellos ni acciones punibles o coercitivas, por eso hacemos la invocación para que quienes elaboran estos productos tengan más cuidado en su preparación.
Por su parte, la MPT, mediante acciones diversas, entre otras la capacitación, prevención y sensibilización, ha logrado reducir el número de vendedores de leche de tigre y leche de pantera. “Antes había más de un centenar de estos vendedores en las calles”, dijo. En el caso de los marcianos, indicó que se sabe que hay 3 o 4 personas que se dedican a su fabricación, lamentablemente sin que su productos sea recomendable para el consumo.
RASPADILLAS
Fernández Bazán explicó, además, que de las muestras tomadas a las rapadillas se detectó que no hay problemas y que sí están aptas para el consumo. Eso se debe a que el hielo que se utiliza para hacerlas se fabrica en buenas condiciones sanitarias. El problema con los marcianos y la leche de tigre está en su elaboración, es decir, al manipular sus ingredientes, reiteró.