César Acuña Peralta
Por Manuel Rodríguez Romero
Desde niño César Acuña Peralta fue exitoso en los estudios y de sentimientos muy humanos, al decir de su profesor Arquímedes Herrera Álvarez, que lo conoció en el colegio de Tacabamba, provincia de Chota, región Cajamarca.
Su padre (Héctor) apenas tenía primaria y su madre (Clementina) no había ido a la escuela, pero eso no fue obstáculo para triunfar. Era el alumno que tenía las mejores notas y como premio de excelencia mereció una beca de la Universidad Nacional de Trujillo.
César Acuña puede dar fe de la importancia que tiene la educación para lograr el éxito. Por eso es que es un apasionado de la educación, por eso es que desde hace casi 30 años apoya la educación de niños y jóvenes.
Esto demuestra que la educación genera desarrollo y que los organismos públicos y los gobiernos de turno, aun cuando así lo reconocen, no quieren invertir en este sector que es fundamental para el despegue del país.
Desde cuando era joven empresario César Acuña daba becas y medias becas a quienes no tenían recursos, en su academia pre universitaria Ingeniería, más tarde lo hizo en la Universidad César Vallejo y ahora en las universidades Señor de Sipán (Chiclayo) y Autónoma del Perú (Lima).
Cientos de hijos de maestros, policías y militares han sido favorecidos con facilidades económicas en la Universidad César Vallejo, al igual que miles de ahijados de promoción (Cada año es padrino de un promedio de 250 promociones).
Su pasión por la educación no sólo está circunscrita a beneficiar a escolares y universitarios, también ayuda a maestros a través de programas de capacitación gratuita y les da facilidades para que sigan una maestría.
Ahora, como alcalde de Trujillo, a cuyo cargo lo ha llevado Dios, tal como afirma con fervor, no puede dejar de aprovechar la ocasión para seguir impulsando la educación de niños y jóvenes.
En el 2008 asignó una partida para apoyar a 80 planteles. Reunió a los directores y en el Salón Consistorial de la Municipalidad Provincial de Trujillo les entregó los cheques respectivos “con la condición que sólo lo inviertan bien”.
Este año ha previsto un millón de nuevos soles para alrededor de cien planteles. Estas subvenciones han comenzado a ser entregadas en las plazas principales de cada distrito. El jueves 26 de marzo lo hizo en La Esperanza y Moche.
Sin embargo, el apoyo mayor está en la obras de mejoramiento del servicio educativo en instituciones donde no ha llegado el apoyo del Gobierno Central. Estas obras, que tienen la particularidad de haber sido gestionadas por los alcaldes escolares del 2008, están siendo inauguradas en estos días.
Las instituciones educativas “San Francisco de Asís” de Pesqueda, “Horacio Zeballos Gámez” de El Porvenir, “Modelo” de Trujillo, “Liceo Trujillo”, entre otras, han sido beneficiadas con la construcción de aulas, servicios higiénicos, cercos perimetrales, techos, etc.
Y como si fuera poco, Acuña Peralta, en calidad de rector fundador de la Universidad César Vallejo, ha decidido regalar 200 computadoras a planteles de la región La Libertad, lo que no hace otro político, y si lo hace es con dinero del Estado.
La generosidad del alcalde de Trujillo va más allá. Desde este año entrega becas cero para que los ex alcaldes escolares estudien en la César Vallejo. El miércoles 25 entregó las primeras 27 becas a los alcaldes escolares del 2008, en emotiva ceremonia realizada en la Municipalidad, ante padres de familia que denotaban felicidad.
César Acuña debe ser el único alcalde del país que los miércoles de cada semana se reúne en su despacho con los alcaldes y regidores escolares de cada plantel, para contarles su experiencia y ver las necesidades de sus colegios. “Seguiré ayudando a la educación hasta que Dios me dé vida”, expresó durante uno de los muchos diálogos con los maestros.