Hubo
cierre anterior, pero siguió atendiendo
Durante años el propietario de un taller de planchado y pintura de vehículos ubicado en la cuadra 9 de la avenida Federico Villarreal utilizaba la vía pública para estacionar los carros de sus clientes y atenderlos contraviniendo las normas, haciendo caso omiso a las quejas de sus vecinos, por ello desde el año 2012 la Municipalidad de Trujillo inició un proceso sancionador y finalmente ayer se procedió a la clausura definitiva del local.
El
taller de planchado y pintura de vehículos no cuenta con licencia de
funcionamiento y no la podrá obtener jamás debido a que el giro del negocio es
incompatible con la zonificación que tiene, que es residencial.
Ello
está tipificado en el cuadro de infracciones con el código B 301, que prevé una
multa equivalente al 180% de la UIT (S/. 6,840), Además, el infractor utilizaba
la vía pública para estacionar los vehículos en la pista y en el área de retiro
para su atención, lo que está tipificado en el código B-324 y equivale al 20 %
de una UIT (S/. 760).
Por
las faltas cometidas, el año pasado este taller fue clausurado por 30 días, sin
embargo reaperturó el negocio haciendo caso omiso a la disposición municipal
por lo que fue nuevamente sancionado con la infracción H -102, que implica una
sanción pecuniaria del 450% de una UIT, es decir 17 mil 100 nuevos soles.
Ayer,
personal de la Subgerencia de Ejecución Coactiva de la MPT, a cargo de Marco Alain
Rodríguez Ríos, procedió a la incautación de los bienes, incluyendo los 11
vehículos que estaban siendo atendidos y se encontraban tanto en la vía pública
como en el área de retiro. Sólo 4 personas pudieron certificar que los autos
eran de su propiedad y así evitaron que
fueran llevados al depósito municipal.
Cabe
indicar que en diferentes intervenciones anteriores Miguel Ángel Guerra López
se mostró reacio a la autoridad municipal y al reclamo de sus propios vecinos, inclusive
en una de las intervenciones él, su hijo y sus trabajadores intentaron poner
resistencia pero fueron controlados por los efectivos de la USE, quienes
estuvieron presentes para mantener el orden al igual que agentes de Seguridad Ciudadana
de la MPT y personal de la Subgerencia de Licencias.
Al
final, a pesar de la resistencia inicial, Guerra López firmó el acta de
intervención donde se indica el cierre definitivo de su taller ubicado en la avenida
Federico Villarreal 920 Mz. A 1 Lote 21.