Durante el ingreso y salida, en los turnos de
mañana y tarde
Con 160 agentes a pie, 58 agentes en moto y 16 camionetas de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT) se puso en ejecución el Plan Escolar de Protección por inicio de clase, con el que se resguarda a un total de 220 instituciones educativas del distrito, para dar tranquilidad a los escolares.
Esta
labor preventiva comenzó en los primeros días de marzo, con la apertura del año
escolar, acción que prevé que los agentes colaboren con el ordenamiento para el
correcto despliegue al ingreso y salida de los menores en los turnos de mañana
y tarde.
“Tenemos como prioridad la vigilancia de las instituciones educativas,
para evitar
que los niños y jóvenes sean víctimas de accidentes de tránsito, robo de
celulares o equipos tecnológicos y evitar a inescrupulosos que merodean para
ofrecer estupefacientes”, dijo César Campaña Aleman, gerente de Seguridad
Ciudadana y Defensa Civil.
También manifestó que a pesar de su ardua labor y deseos por
brindar la seguridad no se puede cubrir todas las instituciones, porque no se
tiene el número suficiente de efectivos, por ello fueron considerados
diferentes criterios para la distribución del personal.
Por ejemplo, los colegios que están situados en avenidas tendrán
entre 4 a 5 efectivos, dependiendo del tamaño y población escolar. También
se evaluó si las instituciones son privadas o
públicas, y por los grados educativos: Inicial, Primaria y Secundaria.
También han puesto en práctica el segundo Plan Escolar de
Deserción, el que consiste en realizar programas preventivos, talleres y
capacitaciones a docentes con temas sobre bullying, planificación familiar y autoestima.
Igualmente,
desarrollan el programa Escuelas para Padres, ya que los problemas sociales
empiezan desde el núcleo básico de la sociedad. “Si los padres y madres de
familia no se comprometen a orientar a sus hijos con valores, buenas costumbres
y dando buenos ejemplos, la incidencia en jóvenes seguirá creciendo”, indicó el
funcionario.
La
finalidad es generar una cultura de seguridad ciudadana, previniendo que los adolescentes
y escolares se evadan de sus centros educativos para irse a cabinas de internet,
playas, parques, cines o a consumir bebidas
alcohólicas.
“Los
alumnos que sean encontrados fuera de sus establecientes educativos en hora de
clase serán puestos a disposición del colegio para que se notifique a sus
padres y ellos puedan actuar a tiempo evitando consumar futuros delincuentes”,
agregó Campaña Aleman.