En
la Biblioteca Infantil de la MPT
Poco más de 60 niños de 3, 4 y 5 años de los “Jardines Municipales” del centro Poblado Alto Trujillo (El Porvenir), fueron recibidos y guiados por los ambientes de la Biblioteca Infantil “Mis Angelitos” de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT), donde les explicaron la importancia de leer, analizaron cuentos y disfrutaron de teatro de títeres.
Estas actividades se van a realizar todos los viernes, a lo largo de todo el año, con
los niños de los Jardines Municipales y de los jardines estatales o
particulares que deseen sumarse al programa y soliciten su participación con
anticipación.
“Es parte
del trabajo de la Biblioteca Municipal, es promover, difundir, fomentar el
hábito de la lectura a temprana edad en los niños, a nivel escolar y familiar,
sea en nuestro local, hospitales o lugares públicos como parques y jardines”,
precisó la Lic. Elva Rosales Mesías, jefa de la División de la Biblioteca
Municipal.
El último viernes llegaron menores de los Jardines
Municipales: “Lucerito del saber”, “Estrellita de Jesús” y “Virgen de Fátima”,
del centro poblado Alto Trujillo, así como de la I.E. Divino Niño Jesús.
Para que se sientan más cómodos, pasaron descalzos
a un ambiente donde se procedió a narrar el cuento “Blanca Nieves y los Siete Enanitos,
destacando el mensaje de no ser vanidosa, envidiosa y malvada, como la
madrasta; y tomar el ejemplo de Blancanieves, siendo buena, sencilla y humilde.
Al finalizar el cuento se realizaron diversas
preguntas para analizar la capacidad de comprensión de los menores, luego pasaron
a disfrutar del teatro de títeres, con una historia basada en valores.
Los
niños que más destacaron, fueron: Erika Polo, Rafael Sifuentes y Yariza García
(de tres años); Daniel Piña, Massiel Rodriguez y Ximena Risco (de cuatro años);
Dagner Chuquipoma, Adelaida Varas y Freisy Rubio (cinco años), a quienes se les
premió por su excelente participación.
Los infantes se comportaron adecuadamente,
guardando silencio durante la lectura, lo que les permitió tener mayor
concentración. Ellos dieron muestras, pese a su corta edad, de querer cuidar los libros prestados y
comprendieron de manera entretenida y dinámica el valor de la lectura y la
aplicación de los valores en la vida diaria.
Al
final de la estimulación los participantes quedaron muy contentos con la
experiencia y prometieron seguir leyendo muchos cuentos.