25 agosto 2014

Madre emprendedora comenzó con 16 cuyes y ahora ya tiene 120

•MPT sigue promoviendo crianza de animales menores.
•Alcaldesa Gloria Montenegro visitó minigranja en el Milagro.


El emprendimiento tiene sus frutos. La alcaldesa de Trujillo, Gloria Montenegro Figueroa visitó el criadero de cuyes a cargo de Laura Rodríguez Cruz, en el centro poblado El Milagro, donde comenzó en esta aventura empresarial con dos módulos de 8 cuyes cada uno y ahora ella ya tiene 120 ejemplares.
La crianza y venta de cuyes también es un buen rubro generador de ingresos económicos para las madres emprendedoras, por eso es impulsada por la comuna a través de la Subgerencia de Desarrollo Empresarial.
“Felicito a quienes siguen adelante con este tipo de trabajo, que necesita no sólo de tiempo sino de amor en lo que hacen. No hay que descuidarse de sus animales, porque si se enferma uno eso pude ocasionar la pérdida del negocio ante una plaga”,  dijo la alcaldesa Gloria Montenegro durante el recorrido para verificar el funcionamiento de la unidad productiva.
Desde el año 2009 la MPT está apoyando a Laura Rodríguez Cruz, iniciándose primero en este rubro con dos módulos, cada uno 8 cuyes, con dos machos y las hembras para la reproducción. Actualmente tiene un total de 120 cuyes de las razas Perú e India, los que cría en su minigranja construida por ella misma en su casa en el sector Los Girasoles del centro poblado El Milagro.
Cada cuy pesa entre 900 gramos y 1 kilo, los que vende a 18, 20 y 25 nuevos soles, dependiendo de su peso, siendo su estrategia de venta: a más cuyes menos costo.
Montenegro Figueroa, se comprometió a apoyar en el arreglo del minicriadero, por ejemplo en el techo, y a dotar con los materiales que permitan crear un buen clima para los animales evitando que por cambios bruscos de clima se enfermen.

El subgerente de Desarrollo Empresarial de la MPT, Rogger Ruíz Díaz, dijo, por su parte, que se visitará constantemente a la señora Rodríguez Cruz, para continuar asesorándola en temas de venta y crianza y para evitar el contagio de bacterias en los cuyes.