16 diciembre 2013

El PAN ofrece talleres a 800 niños sobre estimulación temprana

Niños de área rural maduran antes que los niños del área urbana


Los 800 niños de entre 0 a 5 años de edad que reciben apoyo del Programa Articulado Nacional (PAN), a cargo de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT), participan en talleres de estimulación temprana y reciben apoyo de la Gerencia Regional de Salud, la ONG Circulo Solidario y autoridades locales.
El PAN es un programa que pertenece al MIDIS y en Trujillo está a cargo de la Gerencia de Desarrollo Social de la MPT. Con sus profesionales y técnicos ejecutan diversas actividades en los 11 distritos de la provincia para focalizar y dar tratamiento a niños anémicos y con desnutrición crónica infantil.
Las madres de los niños con estos males y las madres gestantes también reciben beneficios de este programa social nacional, reveló la gerente de Desarrollo Social de la MPT, Tania Baca Romero.
En Trujillo el PAN cuenta con cinco psicólogos que se desplazan con equipos multidisciplinarios a los distritos donde se organizan los talleres y para despertar el interés de los niños se organizan los juegos tradicionales. En estos talleres, que funcionan como una pequeña academia, se prepara a los niños para enfrentar nuevas etapas de su desarrollo.
Previamente los equipos de trabajo visitan y entrevistan a las madres y en muchos casos encontraron abandono de los niños y madres solteras que tienen grandes limitaciones para atender a sus niños, a los que deben dejar para ir a trabajar y obtener el sustento diario, ante la irresponsabilidad del padre.
NIÑOS DEL ÁREA RURAL MADURAN MÁS RÁPIDO
El Coordinador del PAN, Juan Carlos Romero González, dijo que después de más de año y medio de visitas hechas, según informes recibidos, los niños del área rural, que viven junto a sus padres dedicados a las actividades agrícolas, muestran una temprana madurez en su comportamiento, en relación a los niños del área urbana.
Se aprecia que los niños en las chacras  tratan de independizarse para hacer frente a las circunstancias que no se presentan en viviendas del área urbana.
En las chacras los niños no tienen un corralito, ni un andador o lugar cerrado para protegerse y se ven obligados hacer frente a circunstancias imprevistas y defenderse, lo que no ocurre con los niños urbanos.

Todas estas respuestas de los infantes del área rural, los orientan a una pronta maduración e independencia de la tutela materna.