18 marzo 2014

BID presenta cómo afectaría cambio climático en períodos húmedos y de sequía

La ciudad debe prepararse para evitar resultados del calentamiento global


Un estudio presentado sobre los efectos del cambio climático en la ciudad después del año 2020, reveló que la ciudad está expuesta a una congestión de drenajes en el posible caso de un clima más húmedo y que el acuífero de Trujillo podría sufrir las consecuencias en períodos de sequía.
Esto es parte del proyecto piloto “Ciudades Emergentes”, que promueve el Banco Interamericano de Desarrollo y que se desarrolla en nuestra urbe en convenio con la Municipalidad Provincial de Trujillo.
“Este estudio tiene como objetivo contribuir a fortalecer la capacidad de SEDALIB, la empresa de agua y saneamiento de Trujillo, y de las autoridades de la ciudad para adaptarse al cambio climático, también contribuir a crear directrices para la adopción de prácticas óptimas de adaptación al cambio climático en el sector de agua y saneamiento”, dijo Mario Reyna Rodríguez, representante de la MPT ante el BID
La investigación demuestra que es improbable que el cambio climático tenga efectos en el suministro de agua del Río Santa para Trujillo a través del Canal Chavimochic. El suministro anual para Trujillo es equivalente a solo el 4% del suministro para riego a través del canal, y el suministro para la ciudad tiene prioridad.
Además, el Canal Chavimochic fue concebido para servir un área mayor que la cubierta en la actualidad. Por lo tanto, en caso de ser necesario, el Proyecto Chavimochic deberá contar con existencias reguladoras, incluso para aumentar el suministro de agua para la ciudad.
En parte, el suministro depende del bombeo en el acuífero del Río Moche, y ese bombeo podría ser afectado por la sequía. Por consiguiente, los efectos en el acuífero del propuesto bombeo en futuros casos de sequía o humedad se han analizado con un modelo de aguas subterráneas.
El análisis indica que Trujillo está expuesto a una congestión de drenajes en el posible caso de un clima más húmedo, aunque en el caso de un clima más seco la ciudad podría sufrir una escasez de agua después de 2020. Sin embargo, el análisis parece indicar también que existen medidas de adaptación en ambos casos.
RECOMENDACIONES
Ante ello el BID recomienda usar modelos de aguas subterráneas que incluyan un mejor análisis de las aguas subterráneas y de superficie a fin de mejorar los estudios de la percolación y la infiltración, que son actualmente son poco sofisticados.

Para comprender mejor el sistema actual y crear la base para proponer medidas realistas de adaptación, deberán delinearse con claridad los costos y utilidades, las limitaciones y las oportunidades existentes en el sistema de producción. Este análisis deberá diferenciarse en base a los tipos de cultivo y las tecnologías de riego y, de ser necesario, el acceso al financiamiento.