03 junio 2014

Menores de edad ingerían licor en discoteca “El Edén”

Se le viene multa de 15 mil soles y clausura


El cierre del local y una sanción económica de aproximadamente 15 mil soles debe recibir la discoteca “El Edén”, ubicada en la Prolongación César Vallejo, en la urbanización La Rinconada, que fue intervenida por la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT) encontrándose en su interior a menores de edad ingiriendo licor.
Este local fue sancionado con la infracción B-319, por permitir el ingreso a menores de edad en establecimientos con giro como nigth club, club nocturno, discoteca, casino y salón de bailes.
En la inspección se pudo verificar, además, que este local tenía instalaciones eléctricas de alto riego, por lo que en los próximos días, cumpliendo con el proceso administrativo sancionador, se podrá hacer efectiva su clausura y la aplicación de una multa que podría ser de aproximadamente 15 mil nuevos soles.
Las infracciones fueron comprobada durante un operativo inopinado que estuvo a cargo de personal de Licencias, Defensa Civil y Seguridades Ciudadana de la Municipalidad de Trujillo, quienes encontraron al local en pleno funcionamiento y en su interior a menores de edad en visible estado etílico.
Este local realiza todos los fines de semana fiestas para menores de edad -se le conoce como “chicoteca”- e inicia sus actividades desde las 4 de la tarde, hora en que podían asistir sin preocupar a sus padres.
El operativo fue planificado por la Gerencia de Desarrollo Económico Local, a través de la Subgerencia de Licencias y responde al trabajo de ordenamiento de la ciudad, recuperación de espacios ganados por la delincuencia y evitar mayores problemas.
“La finalidad es preservar la unidad familiar, ya que este tipo de actitudes vienen calando en la sociedad y luego, ante el consumo de bebidas alcohólicas y estupefacientes, tiende  a convertirse en problemas mayores, por ejemplo como generadores de pandillaje o delincuencia”, dijo Eduardo Azabache Alvarado, gerente de Desarrollo Económico Local.

Agregó que en este caso también primó la atención a una denuncia hecha por vecinos del sector, quienes estaban cansados de los ruidos fuertes, riñas y desmanes originados a menudo por la ingesta de licor.